MAGISTERIO, Marina Segura Lunes, 28 de agosto de 2023
La implantación de la jornada intensiva en los centros educativos españoles desde los años 90 impacta en la salud y el bienestar del alumnado: descansan y comen peor, hacen más deberes, dedican más tiempo a las pantallas y les obliga a madrugar en exceso. Son resultados de una investigación de Daniel Gabaldón, sociólogo especializado en educación de la Universidad de Valencia. «Está mermando su salud», subraya el sociólogo, quien aboga por frenar las votaciones en los centros que aún deben decidir si aplicar una u otra modalidad.